Sería exagerado atribuir a este libro más influencia en mi vida de la que realmente tiene. Al fin y al cabo, no me hizo cambiar de opinión sobre nada ni tampoco me descubrió nada de lo que no fuera plenamente consciente. Pero sí reconozco que su prosa fluida y sus efectivas metáforas me ayudaron a profundizar en un par de ideas que abracé hace tiempo: que los proyectos (empresariales o laborales) tienen mucha más probabilidad de éxito cuando todos los participantes están alineados con los valores que guían sus decisiones fundamentales y que la vida es un camino que hay que disfrutar en todas sus etapas, no un trayecto anodino, cuando no claramente negativo, hacia un idealizado destino final al que quién sabe si llegarás (como el policía al que, en las películas malas, matan el día antes de jubilarse).
Komisar, con una larga trayectoria profesional en puestos de responsabilidad en muchas grandes empresas tecnológicas y un buen número de aventuras empresariales exitosas, utiliza para transmitir sus mensajes el relato ficticio del proceso de búsqueda de financiación por parte de Lenny, un emprendedor en la época dorada de los negocios de Internet. El proceso de Lenny y su socia para dar más claridad a su idea de negocio y, sobre todo, realinearla con sus expectativas e intereses, sirve a Komisar para proporcionar buenos consejos que servirán a emprendedores y profesionales, principalmente a la hora de reorientar sus carreras profesionales.
El libro se lee con rapidez y es ameno. La historia de Lenny y su búsqueda de financiación va alternando con la historia real del propio Komisar, su ascenso en la industria tecnológica y sus comienzos como emprendedor de alto nivel y “consejero delegado virtual” de muchas empresas. Ambas líneas narrativas están enmarcadas, además, por el viaje en moto de Komisar por Birmania y su encuentro con un misterioso monje que le propone un acertijo en el que se resume el mensaje principal del libro: cómo evitar caer en el “plan de vida pospuesto” (deferred life plan) y dedicarte a aquello que realmente te apasiona.